MONTONEROS

Firmenich festeja los 70 con el debate aún abierto: ¿qué hacemos con esa década?

Mario Eduardo Firmenich, uno de los fundadores de la organización guerrillera Montoneros y uno de sus principales dirigentes entre 1970 y 1983, cumple hoy 70 años. No lo festejará aquí, sino autoexiliado en España, desde donde declaró: "Aquí llevo una vida como cualquiera". Pero no ocurre lo mismo en la Argentina, donde el debate sobre qué hacer con la década del 70 aún sigue abierto, y su vida se cuestiona entre la "cárcel" y/o la "reconciliación".

 
El exjefe guerrillero argentino y uno de los fundadores de la organización Montoneros, Mario Eduardo Firmenich, cumple hoy 70 años. Nacido en 1948, en el barrio porteño de Floresta, hijo de padre ingeniero, y madre docente, egresó como bachiller en el Colegio Nacional de Buenos Aires, uno de los colegios más prestigiosos del país. Se integró luego a la Juventud Estudiantil Católica (JEC) (cuyo centro de reuniones estaba muy cerca del colegio) y llegó a ser nombrado presidente por monseñor Antonio Caggiano. En la JEC conoció al sacerdote Carlos Mugica, cuya obra como benefactor de los habitantes de la Villa miseria "Y.P.F.", tendría una importancia notable en el viraje de sus ideas hacia la izquierda.
 
 
En tanto, a través de las reuniones organizadas por Juan García Elorrio en la revista Cristianismo y Revolución conoció a otros futuros líderes de Montoneros, como Fernando Abal Medina, y se integró al Comando Camilo Torres, del que formarían parte muchos de los primeros guerrilleros.
 
Firmenich integró el grupo fundador de la organización armada Montoneros, junto a Fernando Abal Medina y otros, como Carlos Gustavo Ramus y Norma Arrostito; la organización estaba sustentada ideológicamente sobre una interpretación del peronismo, comprendido como la única forma política revolucionaria adaptada a la situación argentina y fusionada con elementos que cobraron mayor intensidad por la ideología de sus fundadores; una mixtura entre elementos del nacionalismo católico y la revolución socialista cubana.
 
El 29 de mayo de 1970 Firmenich participó de la operación que secuestró y asesinó a Pedro Eugenio Aramburu, al que Montoneros sometió a un procedimiento que llamó "juicio popular", por ser uno de los responsables de los fusilamientos de militares y civiles peronistas en 1956. Con este hecho de gran repercusión pública y que causó la caída del Gobierno del general Onganía, la organización alcanzó un fuerte reconocimiento de los peronistas y comenzó a nuclear a otras agrupaciones guerrilleras.
 
Tras la muerte de Fernando Abal Medina y Gustavo Ramus en un enfrentamiento armado con la policía en un bar de la localidad de William Morris, y de José Sabino Navarro, en la sierra cordobesa durante el Gobierno militar de la llamada Revolución Argentina, Firmenich alcanzó el liderazgo de la conducción nacional de Montoneros, cargo que mantuvo hasta la disolución de la organización.
 
Entre 1971 y los años ochenta, Firmenich lideró la organización político militar Montoneros como secretario general, desempeñándose también como autor de su línea política y de la mayoría de sus documentos a través de las diversas alternativas de la lucha política de la época. A Firmenich se lo consideró frecuentemente representante del ala más militarista de la organización.
 
En 1974, fue detenido por efectivos de la Policía Federal Argentina cuando llevaba consigo una cédula de identidad falsa, un revólver calibre 38, una pistola calibre 9 mm con la inscripción "Policía de la Provincia de Buenos Aires" y una chapa de pecho sustraída en un asalto a un agente de esa institución. El 13 de febrero de 1974 Firmenich fue liberado desde la Comisaría 32 por orden del entonces Jefe de la Policía Federal, general de división Miguel Ángel Iñíguez, siendo este último condenado en primera instancia a la pena de 2 (dos) años de prisión e inhabilitación absoluta por el doble tiempo de la condena, por haber facilitado esa evasión (artículo 281 del Código Penal Argentino). 
 
El 28 de marzo de 1985, la Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal, por los votos de los jueces Ledesma, Valerga Aráoz y D'Alessio, revocó esa condena y sobreseyó definitivamente a Iñíguez, por considerar prescripta la acción penal instaurada en su contra.
 
 
Luego de caída la dictadura militar, bajo el Gobierno constitucional del radical Raúl Alfonsín, Firmenich fue capturado en Brasil, extraditado, juzgado y condenado a 30 años de prisión por cargos de homicidio y secuestro, junto con Fernando Vaca Narvaja y Roberto Perdía. Desde la cárcel lideró el Peronismo Revolucionario, una corriente interna minoritaria del Movimiento Peronista, dedicada a reivindicar los objetivos de la izquierda peronista de los años setenta.
 
Excluido en un primer momento por el presidente Carlos Menem del indulto otorgado a los jefes guerrilleros y militares, finalmente el decreto 2742 del 29 de diciembre de 1990 le otorgó la libertad a Firmenich. 
 
Tras abandonar la prisión, dejó la política activa para dedicarse al estudio y la investigación. Se recibió de licenciado en Economía en la Universidad de Buenos Aires en febrero de 1996, con el mejor promedio de su promoción, aunque el centro de estudiantes de la facultad, liderado por la agrupación radical Franja Morada impidió que se le otorgara la medalla de oro por tal logro. Durante estos años, vivió en su domicilio de Isidro Casanova, al oeste del Gran Buenos Aires. 
 
Posteriormente marchó a Barcelona, donde en 1999 recibió un doctorado en Economía bajo la tutela del premio nobel de economía Joseph Stiglitz.
 
Durante su estadía en Europa se ha desempeñado como profesor asociado en el Departamento de Teoría Económica de la Universidad de Barcelona, y ha publicado algunos artículos en revistas especializadas.
 
En referencia a lo sucedido en Argentina, Firmenich dijo en una entrevista con radio 'La Red' en 2001 que "en un país que ha vivido una guerra civil, todos tienen las manos manchadas de sangre".​
 
En 2004 publicó y presentó su libro Eutopía, desarrollando una propuesta económica alternativa al neoliberalismo vigente. Actualmente reside en Villanueva y Geltrú, provincia de Barcelona, donde se dedica a la labor docente acompañado por su familia y es profesor del Departamento de Economía​ de la Universidad Rovira i Virgili, en la localidad de Reus, provincia de Tarragona. 
 
En octubre de 2015 emitió una declaración política ante las elecciones para presidente en Argentina. Sus conclusiones eran, desde el punto de vista económico: "Situación macroeconómica mala. Situación internacional desfavorable." y en lo social: "Situación social precaria peligrosa. Perspectiva política conflictiva inestable." 
 
El ex guerrillero publicó sus reflexiones en el sitio 'Resumen Latinoamericano', afirmando "quien quiere oir que oiga", y argumentando la necesidad de "comprometerse a un pacto social, económico y político constituyente para una Nueva Argentina compartida por todos".
 
El ex comandante guerrillero indultado por el gobierno deMenem hizo un punteo que comenzó con su "diagnóstico político"."Quien gane será un presidente de minoría parlamentaria con liderazgo partidario débil en un sistema político sin estructuras", dijo antes del balotaje de ese año.
 
Quien habló más tarde también fue su hijo, Mario Javier Firmenich. En una extensa entrevista con la revista 'Noticias', en marzó de 2016, habló de toda su difícil vida desde que nació, su relación con el "Cuervo" Larroque, su opinión de Máximo Kirchner y el desagrado de Cristina para con su apellido.
 
Cuando le preguntaron cuál creía que fue el mayor error del pasado gobierno, sostuvo que fue "la guerra con Clarín". "Si transformás a Clarín en tu enemigo es porque no te animás a apuntarle al enemigo real. Clarín es Goldman Sachs, una corporación internacional. Si vos tenés un relato y los costos que vas a pagar son a partir de ese relato, andá por todo", 
 
Luego, se le consultó por sus inicios en la política militando en La Cámpora, Firmenich respondió: "Tenía muchísimos amigos K y ex compañeros de trabajo como Gabriel Mariotto. Andrés 'Cuervo' Larroque fue mi mejor amigo en el postsecundario. Las cosas me fueron llevando. Tras la muerte de Néstor, el "cuervo" me pidió que arme La Cámpora en Córdoba (donde vive). Yo sabía fehacientemente que Cristina a mi viejo no lo quería. Ella bancaba de Montoneros una posición más cercana a la del 'Perro' Verbitsky", relata.
 
 
"Me obligaron a militar con capucha", explicó Mario Javier, totalmente consciente de que su apellido no es bien visto en la sociedad. Sin embargo, en La Cámpora, según su opinión, su apellido era una simple excusa, ya que no les simpatizaba su forma de pensar: "No había posibilidad de trabajar políticamente con una lógica autónoma. Me negaron rotundamente hablar con la prensa", denunció.
 
Más adelante, aseguró que a pesar de "no coincidir políticamente", su relación con Larroque "no se va a romper", ya que llevan un vínculo de amistad desde la secundaria.
 
Por otro lado, opinó que Máximo Kirchner "es un tipo muy condicionado. Hace política por herencia, casi por obligación" y agregó que hoy "no puede ponerse ni siquiera a tirar piedras. Se tiene que plantar en una posición cuasi conciliadora porque le chorearon la mitad del bloque", acusó.
 
Si bien el sabe de las historias de su padre, no lo defiende y asegura que jamás se planteó en La Cámpora una lucha ni parecida a la que condujo el líder de Montoneros.
 
Además, Firmenich Jr. se reconoce como un peronista "muy crítico del PJ". Creo que es una estructura que ha ido naturalizando e institucionalizando la falta de valores morales. El pragmatismo es llevado a niveles tan extremos que, por ejemplo, Bossio, un tipo que viene de la UCD, pasa a formar parte del peronismo amplio, y después se abre del PJ con una línea propia y un bloque, a dos meses de haber sido funcionario de Cristina. Para nosotros, los peronistas, hoy el Papa Francisco es nuestro máximo dirigente", argumentó.
 
Por último, Mario Javier contó también que su padre "se veía venir un ciclo en el que Latinoamérica pasaba de nuevo a ser importante para el Imperio, para el Norte", explicó sobre la victoria de Mauricio Macri.
 
Desde el Gobierno de Macri es justamente del que sale la propuesta del diputado PRO, Nicolás Massot, de llamar a una reconciliación con los 70, de cerrar las heridas abiertas en la década de los '70.
 
 
El tema fue debatido en el programa 'Intratables', donde Samuel "Chiche" Gelblung, sostuvo: "Yo no creo que vaya haber reconciliación mientras Firmenich esté dando cátedra en la Universidad de Barcelona. Tiene que estar preso y Etchecolatz se tiene que morir en una cárcel".
 
Por su parte, Silvia Ibarzabal, hija de un teniente coronel secuestrado y asesinado por el ERP, se mostró a favor de que haya una "concordancia" respecto de este tema: "No puedo quedarme con esto toda la vida".
 
 
Por su parte Diana Conti, comisionada nacional de Prevención de la Tortura, aseguró que "Massot peca por su edad", respecto de la propuesta que hizo.
Pero el debate sigue abierto...

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