CONTRADICCIÓN

"El Gobierno se inspira en David Ricardo, pero sube el déficit comercial"

Según el Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano, la teoría de los costos comparativos de uno de los padres fundadores de la disciplina económica, David Ricardo, inspira la orientación económica del gobierno de Mauricio Macri. Sin embargo, advierte que al mismo tiempo tienden a crecer cada vez más las importaciones y el déficit comercial.

La teoría de los costos comparativos de uno de los padres fundadores de la disciplina económica, David Ricardo, inspira la orientación económica actual. Así lo explica el último reporte del Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano.

El Gobierno considera que la Argentina debe centrar sus esfuerzos en desarrollar la explotación de aquellos recursos naturales y humanos en los que es competitiva. Tal es el caso de la energía eólica, aprovechando los vientos de la Patagonia; el litio, que abunda en la Puna; el shale gas de Vaca Muerta; la energía solar del NOA, y el turismo a las Cataratas del Iguazú o los glaciares. A todo ello debería sumarse el aporte de la alta tecnología, como en el reciente envío de un reactor de investigación a Holanda. La explotación de tales recursos debería complementar a la agricultura y ganadería pampeana, que alimentan la mayor parte de las exportaciones argentinas”, señaló al respecto Víctor Beker, director del CENE en un comunicado de prensa.

“Todas estas actividades pueden generar exportaciones sin necesidad de contar con el apoyo de un dólar apreciado. Por eso, el retraso cambiario, que es de 23,8% respecto de diciembre de 2015, no aparece como una variable crítica en el mapa de situación de Balcarce 50. En todo caso, se coincide en que debe profundizarse la baja del costo argentino, vía la reforma laboral y el descenso en los costos de la logística”, continúa el economista.

Sin embargo, para Beker, el principal interrogante que plantea este esquema es cuánto tiempo se requiere para la puesta a punto de las nuevas actividades y su irrupción significativa en el mercado internacional. “Mientras tanto, tienden a crecer cada vez más las importaciones. De hecho, el año pasado concluyó con un déficit comercial de casi 9.000 millones de dólares, y el déficit de la balanza de turismo habría sumado 10.000 millones adicionales. El enigma es cuánto tiempo se requiere hasta que las nuevas fuentes de energía, el litio, el turismo y la tecnología aplicada generen un monto anual equivalente”, advirtió el experto.

La teoría desarrollada por David Ricardo a principios del siglo XIX, postula que, aunque un país no tenga ventaja absoluta en la producción de ningún bien, es decir aunque fabrique todos sus productos de forma más cara que en el resto del mundo, le convendrá especializarse en aquellas mercancías para las que su ventaja sea comparativamente mayor o su desventaja comparativamente menor.

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