ASÍ LUCE EL CORAZÓN DE UN OBESO

La cruda imagen que demuestra los estragos de vivir con sobrepeso

Hemos escuchado de psicólogos y motivadores que debemos aceptar nuestro cuerpo tal cual es, pero muchas personas han tomado este lema como excusa para ni si quiera intentar buscar una mejor versión de sí, que más allá de temas estéticos se refiere a la salud y los problemas que conlleva arrastrar año a año los mismos malos hábitos alimenticios e ir acumulando kilos de forma gradual. Para que tengamos una idea de esto último el nutriólogo mexicano David Girón compartió una imagen de los estragos que causa la obesidad a los órganos de nuestro cuerpo en especial al corazón.

Hemos escuchado de psicólogos y motivadores que debemos aceptar nuestro cuerpo tal cual es, pero muchas personas han tomado este lema como excusa para ni si quiera intentar  buscar una mejor versión de sí, que más allá de temas estéticos se refiere a la salud y los problemas que conlleva arrastrar año a año los mismos malos hábitos alimenticios e ir acumulando kilos de forma gradual.

Todos, absolutamente todos, tenemos incomodidades con nuestro cuerpo, pero existen dos tipos de personas: las que cambian sus hábitos esperando mejoras y las que se simplemente no hacen nada por enmendarlo y se sumen en un ciclo sin salida que termina en la obesidad.

La obesidad es una enfermedad crónica tratable que aparece cuando existe un exceso de tejido adiposo (grasa) en el cuerpo.

Con excepción de las personas que son muy musculosas, aquellas cuyo peso supera en un 20 por ciento o más el punto medio de la escala de peso según el índice de masa corporal (IMC), son consideradas obesas. 

Factores socioeconómicos, mala alimentación, falta de ejercicios, factores genéticos y orgánicos, son algunas de las causas implicadas en la aparición del problema que se extiende más allá a la apariencia.

Los expertos advierten de que sus efectos más negativos se producen porque actúa como un agente que acentúa y agrava a corto plazo y de forma muy evidente patologías graves  como la diabetes, la hipertensión. Las complicaciones cardiovasculares e incluso algunos tipos de cáncer.

Sin embargo, más allá de eso no imaginamos el daño que recibe diariamente un cuerpo con obesidad, en especial el trabajo que requiere para mantenerse y garantizar las funciones vitales.

Para que tengamos una idea de esto último el nutriólogo mexicano David Girón compartió una imagen de los estragos que causa la obesidad a los órganos de nuestro cuerpo en especial al corazón.

La fotografía publicada a través de su cuenta en Twitter refleja las visibles y crudas diferencias de un corazón humano sano y uno sometido por años a sobrepeso permanente.

El primero luce rojo, sano y fuerte; mientras que el segundo luce con una enorme capa de grasa que hace imaginar las deficiencias de este órgano vital para mantenerse en funcionamiento.

Lo que no hace llegar a la conclusión de que sí efectivamente debemos amarnos tal y cómo somos, y que mejor forma de demostrar este amor que cuidándonos y cambiando malos hábitos, en busca de una mejor versión de nosotros, con la que nos sintamos mejor, física, estética y espiritualmente, y más cómodos.

10 Hábitos de personas sanas y sin sobrepeso 

  1. Eligen alimentos saludables.
  2. Toman refrigerios bajos en calorías.
  3. Leen las etiquetas nutricionales.
  4. Investigan nuevas maneras de preparar alimentos.
  5. Optan por ingerir porciones pequeñas. 
  6. Evitan las bebidas endulzadas.
  7. Miden tu cintura con regularidad.
  8. Planean tus comidas con antelación sin caer en dietas milagro.
  9. Llevan un diario de tus progresos para motivarte.
  10. Realizan ejercicio de intensidad moderada con frecuencia.

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