RUTA DEL DINERO K

La OA (Laura Alonso) apeló la 'falta de mérito' a CFK

La Oficina Anticorrupción que dirige Laura Alonso apeló la falta de mérito que había dictado el juez Sebastián Casanello a la ex presidenta y senadora Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la causa de “la ruta del dinero K”, por la cual está preso y enfrentando el juicio oral el empresario Lázaro Báez.

La Oficina Anticorrupción que dirige Laura Alonso apeló la falta de mérito a la ex presidenta y senadora Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la causa de “la ruta del dinero K”, por la cual está preso y enfrentando el juicio oral el empresario Lázaro Báez.

La decisión fue tomada la semana pasada por el juez federal Sebastián Casanello, quien consideró que no había pruebas para procesar a la exmandataria, al tiempo que ordenó nuevas medidas para continuar investigándola.

El organismo realizó la presentación ante la Cámara Federal -deberá resolver la Sala II de ese tribunal- y afirmó que “concurren elementos de convicción suficientes para vincular a la encartada con las maniobras y, en consecuencia, dictar su procesamiento”.

Para argumentar su apelación, la OA recurrió a la declaración del imputado colaborador Leonardo Fariña. “De diversos pasajes de la declaración de Fariña surgen indicadores que permiten dar crédito a la imputación que se dirige a la ex presidenta de la Nación”, se indicó.

Además, en el escrito recuerdan que Fariña, en su declaración, dijo que después de la muerte de Néstor Kirchner la entonces presidenta preguntó a Báez “si estaba sacando dinero al exterior”. “Tal revelación es indicativa, por un lado, de que Fernández de Kirchner tenía vocación de dominio sobre los fondos dinerarios canalizados en el exterior por Lázaro Antonio Báez y personas de su entorno”, señaló el organismo.

Para la OA, esto demuestra que Cristina “sabía -o consentía- cuando menos en forma genérica, las maniobras de expatriación, ocultamiento y exteriorización”. “Además tenía vocación sobre el dinero de origen ilícito que manejaba Báez, que en verdad era propiedad de su esposo, y que tras la muerte de éste consideraba que esa fortuna le pertenecía”, agrega la presentación.

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