VIAJE NOCTURNO

Por qué las personas que hemos perdido se nos "aparecen" en los sueños

Todos aquellos que hemos atravesado la pérdida de un ser querido, sabemos que es habitual que, durante el período de duelo, la persona se nos "aparezca" en sueños. Lo mismo sucede en otras instancias traumáticas de la vida como una separación: el tema, o la persona de la que nos estamos separando, se nos "aparece" en sueños. Estos sueños pueden ser angustiantes o frustrantes, a veces nos despiertan y nos indignan: ¿por qué estoy soñando esto? Pero varios estudios demuestran que hay una razón: son una herramienta de nuestra psiquis para procesar un hecho traumático.

En un artículo publicado en el portal Tonic de Vice, Alice Robb -autora del libro 'Por qué soñamos: El poder transformador del viaje nocturno'-, explica que durante las transiciones dolorosas en la vida, tales como una separación o la pérdida de un ser querido, los sueños nos ayudan a atravesar esos momentos.

"Mientras estaba en un viaje de investigación en Perú, la periodista especializada en ciencia, Alice Robb, se apasionó por los sueños lúcidos -el fenómeno misterioso en el cual una persona que está dormida puede darse cuenta de que está soñando e incluso controlar la experiencia del sueño. Estas incursiones le parecieron asombrosas y emocionantes, Robb indagó más en la ciencia de los sueños en un momento extremadamente oportuno: justo mientras los investigadores comienzan a entender por qué existen los sueños. No son solo hchos aleatorios, tienen propósitos claros. Nos ayudan a entender y aún sobreponernos a los traumas psíquicos", explica la descripción del libro en Amazon.

Uno de los estudios que cita Robb lo llevó a cabo la psicóloga Rosalind Cartwright desde fines de los años '70 hasta mitades de los 2000. Cartwright estudió los sueños de personas recién divorciadas. Alrededor de la mitad de ellas estaban deprimidas. Les pidió que durmieran 3 noches en su laboratorio en 2 ocasiones: una en el comienzo del proceso de divorcio y luego otra vez 12 meses después.

Al comienzo del proyecto, un tercio de los miembros del grupo que estaban deprimidos, reportó haber soñado con sus exparejas. Hacia el final del año, aquellos que habían soñado con sus exparejas al comienzo, tenían más probabilidades de haberse recuperado en cuanto a medidas tanto prácticas como psicológicas: su humor había mejorado, sus finanzas estaban más estables, incluso sus vidas sentimentales eran más satisfactorias. Soñar con sus exparejas, al parecer, podría haber incidido en su habilidad para sobreponerse al divorcio.

En otro estudio, Cartwright estudió más detalladamente los contenidos de los sueños de los recién divorciados, a partir de sus diarios de sueños. Ella intentaba descifrar que hacía que algunos sueños fuesen más terapéuticos que otros. Esta vez, rastreó los sueños de 29 mujeres, 19 de las cuales habían comenzado el ensayo deprimidas, atravesando los primeros 5 meses de su separación. Aquellas que estaban en el camino a la recuperación, descubrió, tendían a interactuar con sus exparejas en los sueños de una manera más activa y positiva. Una mujer vio a su exmarido pasando vergüenza en una fiesta y se sintió aliviada de no estar con él. Otra expresó resentimiento hacia su expareja y su nueva novia. Los sueños del otro grupo, mientras tanto -el grup que estaba estancado en la depresión- tenían a la soñadora en una posición más pasiva. En un sueño característico, una mujer estaba parada en silencio mientras su ex salía con su nueva novia en una cita.

No se trata solo de los duelos de amor. Los sueños también nos pueden ayudar a lidiar con la muerte, según Robb. En estos casos, pareciera que el proceso de duelo no es solo durante el proceso de vigilia, sino que continúa mientras dormimos. Muchas personas que han atravesado una pérdida reciente, podrán recordar haber soñado con la persona fallecida poco después de que sucediera el hecho. "El proceso de duelo es complejo e individual, pero para la mayoría de la gente, el trabajo del duelo continúa mientras dormimos; en sueños vívidos e inolvidables, los muertos vuelven a nosotros", escribió Robb en Vice.

En un estudio de 2014, de casi 300 personas que estaban de duelo, en un centro hospitalario de Nueva York, el 58% podía recordar al menos un sueño sobre la persona que había fallecido. Esos sueños no siempre son placenteros, pero ayudan a procesar la pérdida. La psicóloga Patricia Garfield decidió estudiar el proceso de duelo en relación a los sueños, y llegó a la conclusión que estos van cambiando a medida que se van atraveando las distintas etapas del duelo:

Al principio predomina el sentimiento de culpa y esto se refleja en los sueños. A veces, la persona fallecida aparece a cuestionar algo sobre la circunstancia de su muerte, tocando el punto de culpa irracional que suele sentir quien hace poco perdió a alguien. Estos sueños pueden ser angustiantes pero ayudan a la persona a comprender que la otra persona ha fallecido.

> Durante la siguiente fase, que Garfield llamó la "desorganización", el fallecido puede aparecer para decir adiós o como si estuviera a punto de embarcarse en un viaje. El que sueña puede percibirlo como un permiso para volver a vivir.

> En las fases finales del duelo -cuando la persona ha logrado aceptar la pérdida en un grado mayor- se suele soñar al fallecido en situaciones más placenteras, que aluden a momentos felices de su vida.

Sin embargo, hay quien dice que el duelo nunca termina, sólo se aprende a vivir con él. No sería raro que las personas que hemos amado nos acompañen en sueños toda la vida, dado que toda la vida los recordaremos.

Además de su capacidad de ayudarnos a atrvesar separaciones o duelos, en su libro Robb plantea otros datos y cualidades increíbles de los sueños:
-Todos soñamos todas las noches, aún cuando pensemos que no. Los adultos sanos pasan alrededor del 20% de su tiempo dormidos soñando.
-Los sueños nos ayudan a generar nuevas ideas y encontrar soluciones a problemas. Son parte del proceso creativo.
-Los sueños nos ayudan a aprender: practicar una tarea o idioma que estamos aprendiendo en sueños, puede ayudarnos a aprenderlos en la vida real.
-Las pesadillas pueden ser una señal de nuestro cuerpo de alguna enfermedad física o mental.
-Los atletas pueden mejorar su desempeño si sueñan sobre la próxima competencia.

Hay un paso simple que podés dar para conectarte más con tus sueños y recordar más de ellos. Antes de dormir, recordate a vos mismo tu intención de recordar tus sueños a la mañana siguiente. Cada vez que te despiertes, antes de hacer cualquier otra cosa, anotá todo lo que recuerdes de tus sueños. Otra opción es poner un despertador que te despierte durante la noche, cuando estás en tu período de sueño más profundo.

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