OTRA PROMESA INCUMPLIDA

Inflación: De "un dígito en 2019" a "demandará mucho tiempo, paciencia, disciplina y perseverancia"

Los vicepresidentes del Banco Central, Gustavo Cañonero y Verónica Rappoport presentaron este miércoles (23/1) un nuevo informe de política monetaria de enero de 2019. Se mostraron satisfechos sobre la política monetaria, pero Cañonero dijo que bajar la inflación "demandará mucho tiempo, paciencia, disciplina y perseverancia". En campaña electoral, Mauricio Macri dijo que bajarla era "fácil" y que era "la demostración de la incapacidad para gobernar".

" Eliminar la inflación será la cosa más simple que tenga que hacer si soy Presidente", dijo Mauricio Macri en plena campaña electoral, en febrero del año 2015. Dijo que era un problema de la "mala administración" del Gobierno. "¿Cómo no va a ser simple si lo logró el 99 por ciento de los países del mundo? Estar en el 99% no debe ser difícil", se preguntó retóricamente entonces.

Sin embargo, parece que no es tan fácil o que su Gobierno también "administra mal". El 2018 cerró con la mayor inflación en casi 30 años: Se trató de un 47,6% de aumento en los precios. No se percibía un aumento tan alto desde 1991, cuando fue de 84%. Los salarios no aumentaron en la mísma línea, por lo que se estima que hubo una pérdida del 20% del poder adquisitivo.

Este miércoles (23/1) se conocieron los nuevos valores de la Canasta Básica Alimentaria y la Canasta Básica Total. Para no ser indigente, una familia tipo necesita más de $10.000 al mes y, para no estar por debajo de la línea de pobreza, necesita casi $25.000. La inflación generó más pobreza, un fenómeno que el mismo Macri reconocía durante su campaña electoral. La meta de "pobreza cero", olvidada.

Para el 2019, el Gobierno estableció en el Presupuesto una inflación del 23%. Sin embargo, según el relevamiento de expectativas del mercado, los analistas esperan que sea casi del 30%. Ahora, desde el Banco Central reafirman la incertidumbre: Bajarla "demandará mucho tiempo, paciencia, disciplina y perseverancia", dijo el vicepresidente del BCRA, Gustavo Cañonero.

"Los números anualizados muestran el gran problema argentino, lo que hemos hecho no cambia casi nada todavía, no hay magia, esto sólo se resuelve en el tiempo con disciplina. La inestabilidad de la inflación es mayor que la que teníamos antes", agregó Cañonero.

Así es que el discurso del Gobierno dio un cambio rotundo. De apurarse a bajarla y decir que sería fácil a no poder precisar hasta cuándo va a mantenerse alta. De esta manera, la palabra de Macri va perdiendo credibilidad. Sin ir más lejos, en agosto del año pasado, dijo que el 2018 cerraría con un 30%, cuando el número termino acercándose al 50%.

Con las reiteradas predicciones erradas del Gobierno, la incertidumbre sobre el futuro sigue creciendo. En 2017, Mauricio Macri dijo que la inflación bajará a un dígito para 2019. En julio de 2018, pospuso esa meta para el 2020. Ahora, desde el Banco Central sostienen que se necesita más tiempo, paciencia, disciplina y perseverancia.

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