La semana pasada, la DAIA anunció que aceptaba la licencia solicitada por el presidente de la AMIA, Agustín Zbar, tras la polémica que generó el pedido de este último para que se desista de la querella contra Cristina Fernández de Kirchner en la causa por el Memorándum con Irán. Pero esta interna en la dirigencia judía amenaza con ser un nuevo dolor de cabeza para Cambiemos.
GARAVANO EN LA MIRA
La interna en la AMIA podría convertirse en un problema para Macri (a instancias de Carrió)
Elisa Carrió "sigue su andanada de batallar dentro de su gobierno", escribió este lunes (11/02) el periodista Ignacio Zuleta en Clarín, advirtiendo que 'Lilita' pidió investigar qué hay detrás del pedido de Agustín Zbar para desistir de la querella contra Cristina Kirchner. El escándalo salpicaría al propio ministro de Justicia Germán Garavano -a quien Carrió ya ha denunciado- y al presidente de la Corte Suprema, Carlos Rosenkrantz. Según versiones periodísticas, ambos habrían avalado el pedido que hizo público Zbar y que generó una fuerte reacción de la DAIA.
Este lunes (11/02) el periodista Ignacio Zuleta reveló en una nota en Clarín que Elisa Carrió pidió investigar qué hay detrás del pedido de Zbar para desistir de la querella contra Cristina Kirchner y apuntaría contra el propio ministro de Justicia, Germán Garavano. La líder de la Coalición Cívica ya había denunciado al ministro cuando desistió de la acusación contra los fiscales y llegó a pedir el juicio político.
¿Qué tiene que ver Garavano con el pedido de Zbar? Según revela el portal La Política Online, "hay rumores muy fuertes de que (Carlos) Rosenkrantz y Garavano habrían avalado -o al menos no habrían impedido- el pedido que hizo público Zbar y que generó una fuerte reacción de la DAIA, que terminó ratificando que sostendrá la querella contra Cristina".
En cuanto al vínculo con el presidente de la Corte, LPO indica que el texto de Zbar habría tenido colaboración de Federico Morgenstern, colaborador de Rosenkrantz y actualmente el secretario letrado en lo penal de su vocalía. Zbar y Morgenstern son amigos y el dirigente de la comunidad judía realizó correcciones y participó de la presentación del libro sobre 'Cosa Juzgada Fraudulenta'.
LPO también indica que Zbar es amigo y fue socio de Rosenkrantz (que en la última cena de la AMIA lo definió como su "amigo de toda la vida"). En 1990 fundaron junto a Gabriel Bouzat el estudio Bouzat, Rosenkrantz & Zbar, que llevó ese nombre hasta 2001. Las especulaciones indican que se habrían encontrado antes de la difusión de la carta.
Dicho portal recuerda que durante su paso por la gestión pública -en 2001 fue nombrado como subsecretario de Justicia de la Ciudad-, Zbar quedó en la mira por el caso las hamburguesas contaminadas, cuando frenó una denuncia contra McDonalds que, justamente, era defendida por el estudio de su amigo Rosenkrantz. El ahora ex presidente de la AMIA además tenía en su gabinete a Guillermina Rosenkrantz, hermana del juez.
En síntesis, esta polémica que se desató entre la DAIA y la AMIA por la querella contra Cristina podría terminar salpicando al Gobierno, que llamativamente se ha mantenido en silencio sobre este tema. Recordemos que el único que opinó públicamente fue el diputado Waldo Wolff, ex vicepresidente de la DAIA. Pero ninguno de los ministros, y menos Mauricio Macri, ha querido referirse a esta cuestión en público, aun cuando se trata de una denuncia contra CFK que podría caerse.