Zapatero se convierte en abogado de K e intercede en su pulso con las empresas españolas

Néstor Kirchner encontró en Rodríguez Zapatero a su mejor abogado en ese pulso constante que mantienen el Ejecutivo argentino con las empresas españolas con intereses en el país. "En la discusión de las naftas, Bettini -designado para ser el nuevo embajador en Madrid- fue muy importante. Estuvo a cada segundo en comunicación con Rodríguez Zapatero. Y Rodríguez Zapatero jugó muy bien", declaró el presidente argentino al diario Página 12. Con estas palabras, Kirchner venía a poner al descubierto las gestiones realizadas por Zapatero; una labor que, a tenor de lo enunciado por el argentino, redundó en beneficio del gobierno y no de las empresas de capital español, como sería de suponer.

Hay casos concretos de los que ha tenido conocimiento El Confidencial que así lo atestiguan. De acuerdo con fuentes oficiales, Zapatero y Kirchner mantuvieron al menos una comunicación telefónica el jueves 13 de mayo, cuando el gobierno argentino presionaba a Repsol-YPF para que no subiera los precios de las gasolinas y, como cabeza visible de las empresas extranjeras presentes en aquel país, pusiera orden entre las demás para que también mantuvieran congeladas las tarifas.

Esa misma semana, Kirchner tuvo una agria discusión con Ramón Blanco, número dos de Repsol. Fue tal el enfrentamiento que el presidente de la petrolera, Alfonso Cortina, tuvo que intervenir directamente para calmar los ánimos. Como anécdota, en la Casa Rosada aseguran que Kirchner >"obligó" a Blanco a escuchar un CD del cantautor argentino León Gieco, en el que se incluía la canción "Cinco siglos igual" ,que habla de la conquista española de América. Blanco entendió la indirecta.

Según reveló el mandatario argentino, Zapatero no fue el único que hizo las veces de intermediario entre el Ejecutivo y las empresas españolas. Bettini, el polémico candidato de Kirchner para ocupar la embajada en Madrid, también tuvo un papel clave: "No sólo en las naftas. Las telefónicas no van a aumentar las tarifas. Que me traigan un sólo hecho de corrupción de Carlos (Bettini). Pero yo no digo, como Menem, que vayan a la Justicia. No: que vengan a mi escritorio", dijo el presidente a Página 12.

Bettini, que es un viejo conocido de Kirchner, sufrió la desaparición de cuatro miembros de su familia durante la dictadura militar, tuvo que exiliarse en España y, una vez aquí, supo construir una relación personal, política y hasta empresarial con Felipe González. Con contactos fluidos en Repsol-YPF y Telefónica de Argentina, Bettini ha conseguido para Kirchner que estas empresas congelen precios y tarifas hasta nuevo aviso. Tras esto, el presidente argentino anunció la candidatura de Bettini para ocupar la embajada en Madrid.

Aunque el poder de su agenda telefónica ha sorprendido al propio presidente argentino -que apuesta decididamente por él-, el embajador sigue sin tenerlas todas consigo. Y todo porque la oposición a Kirchner está arremetiendo duramente contra él por considerarlo un lobbista de las empresas españolas... y no sólo de Repsol-YPF.

Así por ejemplo, en una conversación telefónica que mantuvo con un ex ministro de aquel país, un miembro del grupo Prisa se mostró más que preocupado por "lo que se está diciendo en Buenos Aires sobre Carlos. Aquí, en Madrid, un diario de Internet está meneando el tema y nos preocupa", dijo el representante del grupo mediático.

La preocupación del Grupo Prisa por la suerte de Bettini es entendible. En la última visita de Kirchner a Madrid, Jesús Polanco se hizo acompañar de Bettini a la entrevista que mantuvo con el presidente argentino. Además, en Buenos Aires es conocida la representación del Grupo Prisa, quizás informal, que ostenta Bettini, quien, en nombre de esa compañía, busca lugares dónde invertir.

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(*) De la redacción de El Confidencial

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