Felipe Solá en retirada y el duhaldismo acecha la Casa Rosada

Marisa Álvarez tiene varias novedades en su columna dominical en el diario El Día, de la ciudad de La Plata (suplemento 7mo. Día. ¿Por qué 7mo. Día si sale los domingos, Raúl Kraiselburd?). Aquí unos párrafos que cuentan cómo el duhaldismo avanza sobre la Casa Rosada.

"(...) Con fecha para la elección de la nueva conducción partidaria definida -el 21 de noviembre-, la dirigencia del peronismo bonaerense se lanzó ya abiertamente a jugar el juego que más le gusta, el del reparto del poder. Definidamente duhaldistas en su mayoría, esos dirigentes lo juegan además como saben hacerlo: sin límites, si de pulseadas, demostraciones de fuerza, roscas, chicanas y movidas políticas se trata.

Será un reparto de poder interno, de modo que habrá duras batallas entre ellos mismos y unos cuantos preparan ya las armas. (...)

Pero todo éso quedará para una segunda etapa, aunque haya algunos que ya no duerman preparándose para aquellas disputas. Por ahora, la dirigencia duhaldista ha encontrado un adversario interno con el que pelearse en bloque como "sector": el felipismo que, por cierto, le ha facilitado bastante las cosas en ese sentido, con una estrategia sobre la que llovieron críticas toda la semana, desde sus propias filas.

Todo comenzó el lunes, cuando el jefe de Gabinete bonaerense y operador del felipismo, Florencio Randazzo, fue a la reunión del consejo del PJ, en la que se iba a aprobar el cronograma de renovación de la conducción partidaria. Lo que se suponía una formalización de la aspiración del sector -que Felipe Solá tenga un rol preponderante en la futura mesa- terminó en una especie de refriega futbolera de la que, según todas las fuentes, Randazzo salió derrotado algo así como por "20 mil a cero".

Algo no funcionó, al menos en las formas en que el operador felipista explayó el planteo. Porque le contestaron con extrema dureza Manuel Quindimil y Hugo Curto pero, además, los aliados del Gobernador que estaban en la reunión -los intendentes de La Matanza, Alberto Balestrini, y de La Plata, Julio Alak, entre otros- no dijeron una sola palabra en defensa del despliegue de Randazzo.

El segundo capítulo se escribió el jueves, en Chacabuco, aunque fue ésa una jugada elaborada y compleja, con mensajes a varias puntas.

En la superficie, el antifelipismo feroz que profesa el diputado provincial y jefe peronista de aquel pago, Julián Domínguez, y la ausencia de Solá en un acto que presidió Néstor Kirchner, marcaron una segunda vuelta de esa pelea, en la que el duhaldismo se encargó de mostrar a Domínguez rodeado de sus dirigentes más fuertes de toda la Provincia.

En efecto, en una movida absolutamente inusual, fue a Chacabuco una representación "calificada" de los dirigentes del Conurbano (los intendentes Hugo Curto, Alberto Descalzo, Gerardo Amieiro y Baldomero Álvarez; y el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Osvaldo Mércuri). Fue, también, Díaz Bancalari. Y el Presidente aportó, integrándolos a su comitiva, a dos de sus ministros bonaerenses, Aníbal Fernández y José Pampuro.

Por lo demás, Kirchner sabía que el organizador del acto, Domínguez, es un antifelipista -quizás el único en los términos en que él lo es- que no descansa en su pelea con el Gobernador. Solá se lo había dicho una semana antes, cuando le dijo que en Chacabuco iba a "haber de todo, incluido lo peor del duhaldismo" y le anticipó que quizás no fuera al acto.

(...) El Presidente tiene una premisa: "sumar y después ver" y la cumple a rajatabla. (...) Y la dirigencia duhaldista provincial no se instaló el jueves en esa ciudad del interior sólo para hacer una demostración de fuerza ante el felipismo. (...) El concepto "rodear a Kirchner" pertenece a los estrategas de la movida de Chacabuco. No ignoran que el Presidente está en la etapa de "sumar" y por lo tanto también le sirve. (...)

Kirchner y Duhalde, mientras tanto, volvieron en estos días al diálogo directo y reservado sobre estrategias políticas y partidarias.

Y en la Gobernación, en tanto, aseguran que Solá (...) también va a apelar al diálogo".

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Nota completa:
http://www.eldia.com.ar/suplementos/7dia/nota3.asp

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