Tema de la Semana: La 3ra. Marcha de Blumberg

El Gobierno parece vivirlo con mucha tensión, tanto a nivel nacional como bonaerense. Por igual, la izquierda y el justicialismo consideran a Juan Carlos Blumberg un adversario, y no la corporización de sus fracasos como políticos (y periodistas) berretas de una Argentina decadente.

Cada día más impotente ante la realidad que le pasa por arriba, Mario Wainfeld es un vocero, desde Página/12, del kirchnerismo no peronista que se preocupa con Juan Carlos Blumberg, se enoja con lo que considera una traición a Néstor Kirchner de parte de Felipe Solá, y expresa la apuesta de la Casa Rosada al fracaso de la 3ra. Marcha:

"(...) "El Gobierno se sorprendió en la primera convocatoria de Blumberg. Desde entonces no se distrajo de él. Cuando Beliz fue removido y se debatía contrarreloj quién sería su sucesor, uno de los ítem que integró el casting fue la relación entre el nuevo ministro y Blumberg. Un protagonista de esas reuniones asegura que algún legislador perdió puntos tomando en cuenta ese factor. "No se pensaba en un veto –explica un asesor del Presidente–, pero se reconocía un poder."

Poder que sigue teniendo su peso. La semana que termina hoy, el Congreso "cometió" un dislate legal. Una norma que suma matemáticamente las penas de delincuentes repetidores, que puede desembocar en que un ladrón de gallinas reincidente purgue mucha más cárcel que un homicida.

Se trata de una de las tantas leyes insensatas impulsada por Blumberg que el Congreso sacó como si fuera una minuta: rapidito y con fritas. El Presidente debería vetar esa norma dislocada, que le pone los pelos de punta a juristas de la talla de Ricardo Gil Lavedra y también a abogados de buena formación como son Alberto Fernández y Carlos Zaninni. (...)

(...) Lo mueven los celos –dice el funcionario ya citado– está pendiente de si Arslanian lo cita cuando dialoga con los periodistas. Puso a Rivara que era su amigo y fracasó. No quiso ni hablar de (Marcelo) Saín.

Y ahora que tiene al ‘Gordo’ (Arslanian), que es la persona más capacitada para ese cargo, no lo apoya suficientemente."

La ansiedad del gobernador por la repercusión mediática, relatan en la Rosada, lo movió a costearse a la casa de los padres de Nicolás, ingresar por su parte posterior y obtener de la familia una segunda carta que dispensó agradecimiento y buen trato a la Bonaerense. Cuando Kirchner se enteró, tronó su furia. "Piensa en él solo, es un egoísta", cuentan que fulminó.

Un allegado muy estrecho de Kirchner acumula cuestionamientos y anécdotas. Un par bastan como muestra.

- "A Kirchner lo saca de quicio que el gobernador se preocupe por no tener claro su futuro político en 2007. En medio de todo este lío se lo comentó al Presidente. ‘Goberná, Felipe y dejate de embromar’, le dijo Néstor, como toda respuesta."

- "Le reclaman por la falta de seguridad en la provincia y nos pide plata a nosotros. Decidimos aumentar los sueldos y dice que le complicamos la gestión. Lanzamos un plan de obras públicas y exige privilegios. El gobernador es él, no puede ser que siempre derive los reclamos."

Ese marco de malhumor y desconfianza connota las últimas medidas del Gobierno.

La primera es promover más acciones en la provincia con participación de las fuerzas federales. La intención es la consabida saturación policial, inducir a los delincuentes a sentirse cercados, romper las redes de solidaridad o de temor en barrios y villas.

Y también sacudir lo que el Gobierno percibe como modorra de la Bonaerense. Modorra registrada, y también comunicada, a Kirchner por los superiores de los uniformados federales que transitan la provincia.

Respetables por su dolor, emergentes como Blumberg y la madre de Nicolás suscitan identificaciones muy directas de quienes como ellos son padres o madres y temen por sus hijos. Pero puestos a pontificar sobre políticas concretas son (nada menos) que ciudadanos comunes.

El poder de movilización de Blumberg, que seguramente permanece vigente, no disuelve la trama de las instituciones existentes ni suprime al claro mecanismo del voto. Es una aclaración que parece banal pero que no lo es tanto.

Hace unos días, el matutino de negocios Ambito Financiero destacó que Blumberg tiene cinco millones de votos, aludiendo (resignificando) las firmas que acompañan el petitorio de la Cruzada por Axel. Esa intención de reemplazar los votos (que se emiten en circunstancias solemnes, tras meses de debates públicos y reflexión ciudadana) por instancias plebiscitarias connotadas por la emoción y la imprecisión remiten como una flecha a Venezuela. (...)"

------------

Nota completa:
http://www.pagina12web.com.ar/diario/elpais/1-40016.html?PHPSESSID=49d94ccbe1c0e251c613f9086e16df69

----------------
----------------

Marisa Álvarez, desde el suplemento 7mo. Día, del diario platense El Día, también se ocupa de Blumberg, de la entrevista entre Kirchner y Solá, y destaca los magros resultados obtenidos por la provincia de Buenos Aires:

(...) Lo cierto es que, frente a un Arslanián que habló de un déficit de 16.000 efectivos en la Provincia cuando pidió más efectivos nacionales, el Gobernador consiguió un refuerzo de 200 hombres. Y no pudo "cerrar" el envío de 100 millones de pesos que le reclama, como fondo extra, a la Nación para el rubro Seguridad.

La definición del "día y hora" en que se concretaría ese aporte volvió a quedar enredada, en la conversación entre Kirchner y Solá, en otro capítulo de la negociación de todo el paquete financiero: unos $ 600 millones que el Gobernador pide, para los próximos tres años, como compensación por el no aumento de la coparticipación impositiva, y que incluye los capítulos de Salud, Educación y asistencia social.

Esta postura, sin embargo, no significa que el Presidente no asuma que la ciudadanía espera, a esta altura, su respuesta para recuperar la seguridad perdida. En la reunión con Solá no ocultó el impacto por la contundencia con que la madre de Nicolás Garnil expresó ese reclamo.

(...) El traspaso de ese área al ministerio que conduce Aníbal Fernández derivará en anuncios fuertes de medidas, una suerte de nuevo plan de seguridad. Y también tendrá, en principio, un inevitable rebote político. Elegido para esta responsabilidad por el Presidente por su ejecutividad y su concentración obsesiva en los temas que encara, Fernández es también un activo dirigente del peronismo bonaerense que no oculta ni esa condición ni su pretensión de ser candidato a gobernador en el 2007, y que mantiene fluida relación con intendentes duhaldistas del PJ del Conurbano y del interior, pese al enfriamiento de su relación con el propio Eduardo Duhalde.

Definitivamente más fría -tensa y surcada de desconfianzas, en rigor, como lo reflejan sus públicos cruces verbales- es la relación del flamante responsable nacional de la Seguridad con el Gobernador, que se enteró por TV de la movida de Kirchner e incluyó en el llamado de felicitación a Fernández, en la misma noche del viernes, alusiones amistosas a sus "peleas".

En rigor, el objetivo de llegar a la Gobernación refuerza en Fernández la convicción de que con esta nueva responsabilidad se juega su destino político; un marco en el que el ministro promete llevar en Seguridad una gestión acorde a la gravedad de la situación y la demanda ciudadana y a la que como "prioritaria y excluyente".

Las acciones y los mensajes de "los gobiernos" -y del Congreso, que esta semana votó una ley que integraba el petitorio de Blumberg y esperaba turno desde hacía dos meses-, en fin, están por estos días orientados a dar respuestas en materia de Seguridad (aunque no podría decirse lo mismo de la Cámara de Diputados bonaerense, que dejó pasar otra semana sin definir una de las leyes del plan provincial, la de los foros vecinales). Y, se reconozca o no, nadie puede dejar de pensar en la "movilización de Blumberg" del próximo jueves.

Pero un día antes habrá otra movilización. La reapertura del astillero Domeq García, el miércoles en el Puerto de Buenos Aires, presidida por Kirchner, tendrá como marco -si se persiste con la idea, por ahora encarada con reserva- una fuerte concentración de respaldo al Presidente y su gobierno. Los intendentes peronistas del Conurbano, a cargo de la movida, se proponen aportar "no menos de 15 mil" manifestantes.

(...) Por lo demás, no sólo de Seguridad hablaron Kirchner y Solá en su encuentro del miércoles. También la cuestión salarial fue abordada. Y en ese rubro le fue aún peor. (...)"

-----------

Nota completa:
http://www.eldia.com.ar/suplementos/7dia/nota3.asp

Dejá tu comentario