Para un triunfo clave en Santa Cruz, Kirchner deberá componer con la billetera

Se acerca el 2007 y se aceleran los tiempos políticos. Para el candidato del PJ es imperativo que los problemas de Santa Cruz comiencen a resolverse hoy. Para los que deban sufrir la transición el dilema es saber qué quedará de ellos después. Hoy nadie toma decisiones. Todos dependen de Buenos Aires y hasta aquellos que aparecían dando algunas explicaciones de vez en cuando, enmudecieron.

Río Gallegos, SANTA CRUZ ( OPI Santa Cruz) - No es mi intención ser apocalíptico ni llevar preocupación a la gente que desde lejos se prende en la web para saber qué pasa en Santa Cruz, pero cuando uno enfoca el prisma del análisis primario en la realidad de nuestra provincia, no puede menos que transmitir inseguridades porque la realidad en si no muestra, desde cualquier aspecto que se la intente visualizar, un esquema de gobierno sólido, un plan visible, un horizonte claro y un norte político cierto.
Falta lo fundamental que es conducción política. Hoy Santa Cruz no tiene una cara visible, más allá de la vuelta forzada del Vicegobernador que ha sido impulsado a retomar sus actividades protocolares sin convicción ni efectividad, hasta se diría con la pretensión de acallar el bullicio popular y los rumores, más que para reestablecer la gobernabilidad. Detrás de él no hay ninguna figura sostenedora del poder vacuo que puebla los pasillos de la Rosada santacruceña.
Indudablemente Santa Cruz está fuera de control en lo que hace a la dirigencia de gobierno local y da la sensación que de Acevedo para acá se transfirió totalmente el orden decisorio a Buenos Aires al punto que de acuerdo a las infidencias que hemos obtenido de algunos funcionarios provinciales de segunda línea, hasta para las cosas mínimas de inversión o gestión deben levantar el teléfono y hablar con la persona indicada, es decir Néstor Kirchner o quien éste haya designado en el primer anillo presidencial.
El silencio de los funcionarios
Signos elementales de la falta de gobierno lo dan las figuras que se muestran o las que faltan como ausentes sin aviso en la cartilla del menú político provincial, repasemos:
El Ministro de Gobierno Daniel Varizat está considerado el "hombre fuerte" en la provincia, hilo conductor de bajada directa de las órdenes presidenciales. Si bien al inicio de la gestión de Sancho tuvo una actividad mediática más o menos visible, luego de sucesivos yerros tanto procedimentales como dialécticos, que sirvió para que desde algunos sectores lo ridiculizaran; su exposición pública se minimizó y quedó relegada a algún acto oficial cubierto por el canal del estado o de su amigo Rudy Ulloa Igor. Nadie supone que ha perdido poder, porque sencillamente nunca lo tuvo. El único poder se concentra en Balcarce 50 y desde la caída de Acevedo el gobierno de Santa Cruz tiene un solo y único conductor.
El Ministro de Economía Juan Bontempo es una figura decorativa en el cargo, necesario por su obediencia y ejecutividad en las órdenes que recibe, pero quien maneja en la práctica los hilos técnicos del área es Juan Manuel Campillo, hombre de gran confianza del presidente, uno de los pocos que conoce con precisión la ruta del dinero en el exterior de la provincia.
El Ministro de Economía pasa a ser un hombre que transmite acabadamente los pedidos superiores y se encarga de controlar que se cumplan. No obstante Bontempo se ha transformado en el "hombre gris" que ni siquiera está profesionalmente habilitado para el puesto que desempeña ya que es licenciado en Ciencias Políticas. Una evidencia más de que todas y cada una de las decisiones en materia económica provienen de Buenos Aires es que últimamente los que reclaman en Santa Cruz van a cerrar tratos a la Casa Rosada buscando la bendición de Kirchner, como los trabajadores de la salud por ejemplo.
Roque Ocampo, una persona que ha sido herencia de la gestión de Acevedo, perdura como Ministro Secretario y a pesar de su perfil contestatario, evidentemente ha sido llamado a silencio y hoy su performance pública muestra un muy bajo perfil y escasa participación en los medios, privado de aquellos diálogos interminables en los que se cruzaba con algunos sectores que solían protestar por alguna reivindicación que obviamente nunca lograron.
El Ministerio de Interior ocupado por Carlos Siurca ha desaparecido literalmente de la escena pública y hace tiempo no resuena en ningún ámbito donde por el factor de incidencia que tiene tan importantísima cartera, debiera estar tomando el timón de los conflictos sociales y la inseguridad y participando en el lineamiento de políticas para descomprimir factores de presión que actúan sobre el gobierno en su conjunto y que erosionarán al que venga.
Una prueba de cómo este gobierno se retrae, se resume asimismo, se encapsula si cabe el término, lo observamos luego del golpe al gobernador anterior, cuando ya asumido Sancho hizo desaparecer la Subsecretaría de Seguridad y le dieron al Ministerio de Siurca esa responsabilidad, que antes tenía una persona que jamás supo cumplir una función efectiva, como fue el caso de Balois Pardo que acompañó al truncadense o los que lo precedieron que eran amigos o militantes, pero nunca profesionales para conducir un área tan sensible como el de la seguridad pública.
Seguramente la decisión presidencial de eliminar la Subsecretaría de Seguridad respondió a los bajos resultados, pero equivocadamente una vez más se hace hincapié en la institución y no en los hombres que la pueblan, los cuales con su inoperancia vuelven inservible cualquier instrumento que como este son necesarios para descentralizar el manejo de las crisis.
Uno de los lugares más trascendente desde lo operativo es el MAS (Ministerio de Asuntos Sociales) a cargo de la señora Nélida Álvarez de Campos, territorio predilecto de Alicia Kirchner quien ungió con el orden sucesorio a la actual Ministro por cuyas manos debieran pasar desde las políticas de salud hasta los asistencialismos. Sin embargo encorsetada en el discurso lineal de la senadora que ha ordenado decir a todo que no, Campos se debate entre el incontrolable conflicto con los trabajadores de los hospitales que ya la han hecho trastabillar en su cargo y una encomiable tarea de respaldar a Alicia cuando ésta el año que viene encare la recta final por las elecciones a la gobernación.
La Presidenta del Consejo Provincial de Educación Silvia Esteban sigue sin acertar en cuáles son los parámetros de la educación que debe defender, dado que en su anterior gestión hace dos años reconocía como inmejorable el discutido sistema que por entonces defendía con uñas y dientes y luego del regreso, como si hubiera nacido a la política en este último año y no guardara memoria, ha optado por ponerse al frente de la Ley Federal de Educación sin guardar respeto por la memoria reciente.
Mientras esto pasa el salario en negro de los docentes produce más reclamos y los conflictos van creciendo en forma exponencial sin que se intente abrir un diálogo sincero y concreto con los educadores.
¿Cómo llegarán?
Indudablemente una de las preguntas que nos hacemos, quienes analizamos el desenvolvimiento de la política en Santa Cruz, es cómo va a llegar el justicialismo a las elecciones del 2007 si persiste en mostrar tamaño deterioro institucional en su acción de gobierno.
El FPVS no tiene a quien echarle la culpa de lo que le pasa y por ende debiera estar más empeñado en salvar lo que queda del naufragio, porque indudablemente de seguir así no habrá figura que convenza al electorado que votar a un candidato del PJ asegurará un cambio para mejorar la actual situación social y política.
Gremios, inseguridad, salud y educación son temas claves para la administración que venga pero de ninguna manera el justicialismo va a tener tiempo de esperar las elecciones para arrimar soluciones. Las soluciones deben empezar ya y a juzgar por las actitudes blindadas del actual gobierno, no se avisora un cambio en la mentalidad de quienes creen poder manejar el poder y los votantes.
Frente a lo que actualmente muestra el oficialismo existe la posibilidad de un crecimiento hasta hace poco impensable de las posibilidades de sus competidores en las urnas. El crecimiento del FUT, de la UCR y del mismo Partido Socialista de la mano de Di Tulio en el norte, sin desmerecer a ninguno de estas agrupaciones por sus méritos propios, es también por el aceleramiento del desgaste al que se autoexpone el PJ santacruceño que cree haber sacado chapa de eterno.
Maniobra peligrosa
De acuerdo a lo que sabemos de fuentes muy confiables el próximo paso podría ser el posicionamiento de una figura componedora que diera imagen al gobierno provincial e inclusive sabemos que el propio Kirchner habría sugerido a Daniel Peralta que prepare su vuelta a la Cámara de diputados para desde allí, mediante un nuevo recambio de autoridades, pueda quedar en lugar de la Diputada Forstman y siendo presidente 1º reemplazar a Sancho que podría dar un paso al costado por fundadas razones de salud.
Cabe acotar tres cosas: Una que el gobierno no tiene tiempo para esperar a diciembre. La solución de los problemas como la salud, el empleado público y la seguridad son materias pendientes desde hace años, con lo cual no resolverlos en los meses que corren es aumentar el disconformismo y volcar voluntades que se pueden volver en contra de las aspiraciones del próximo candidato.
En segundo lugar una nueva parodia dentro de la legislatura, similar a la vivida con Marsicano, pondría en blanco sobre negro la voluntad que tiene el oficialismo de manejar a su antojo las instituciones, siempre que el fin sea ajustar el talle de la política a las necesidades del poder que tengan en la ocasión, tal como sucede a nivel nacional.
El tercer tema es puntualmente cómo quedará políticamente Peralta, si hipotéticamente se diera esta posibilidad, luego de haber pasado por esta trituradora de imagen que hoy por hoy es la transición de gobierno. No cabe duda que obedecer un pedido de este tipo significaría un sacrificio extremo para quien tiene puesta la vista en el horizonte político de la ciudad de Río Gallegos y por qué no de la provincia, en un futuro.
Es decir que las opciones son pocas y algunas de ellas poco aconsejables. Por otra parte quien asuma indudablemente va a cargar sobre sus hombros la responsabilidad de una transición irregular, desprolija, descontrolada, sin rumbo ni políticas.
¿Qué hará entonces el presidente Kirchner para asegurarse un triunfo, no ya categórico, sino al menos claro en la provincia?. Por el momento nadie lo sabe, pero en el corto tiempo se develará el misterio porque a Santa Cruz es indispensable que ya mismo la empiecen a componer con la billetera, y no hablo de subsidios y obra públicas que ya sabemos para que sirven, hablo de aumento de salarios, reducción de sumas en negro y en general una recomposición real de los ingresos de la gente que desde hace 15 años pelea por llegar a fin de mes y sueña con que el día que se jubile no tenga que pasar automáticamente a la categoría de indigente.
 
 

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