OSCAR AGUAD

"Es una violación flagrante del artículo 114 de la Constitución"

Oscar Aguad, jefe del bloque UCR de diputados nacionales, fue el 1er. orador de la oposición durante el debate en la Cámara baja de la reforma judicial propuesta por el Ejecutivo Nacional. Aquí algunos párrafos interesantes:

 

"(...) Señor Presidente:
 
En esta sesión estamos decidiendo si estamos dispuestos a defender nuestra Constitución Nacional o nos colocamos al borde de la legalidad. Si estamos dispuestos a defender un sistema de convivencia en paz, resguardando derechos y garantías individuales o consentimos que un proyecto de poder destruya el estado de Derecho para perpetuarse con impunidad y sin límites ni controles.
 
Saben que frente a este atropello es indecente permanecer callado, también que estras son las ocasiones en las que se ponen en juego las cuestiones fundamentales donde case siempre hay posturas enfrentadas radicalmente.
 
Nosotros, nuestros representados, que por esa razón del destino, cada vez son más, creemos que el gobierno se prepara para dar un golpe letal al sistema al sistema de convivencia basado en el respeto por la constitución, la ley, la división de poderes, su equilibrio y la imparcialidad de los jueces para juzgar.
 
Callarse en este momento equivale a mentir y dejar sin representación  a quienes nos colocaron en estas bancas.
 
Esta ley constituye la ruptura del pacto intergeneracional de convivencia contenido en la Constitución Nacional.
 
Estos años, no se han caracterizado por el respeto del derecho, estamos frente a quienes presumen que pueden violar la ley sólo para complacer su conveniencia.
 
La prueba de la solidez de una ley está en su vitalidad; se trata de una larga vida histórica. Estas son las normas difíciles de crear.
 
Hoy tratamos una de esas leyes de corta vida, que fue sancionada en el 2006 por conveniencia y que hoy también se cambia por otra conveniencia y que cómo aquella le espera una corta vida.
 
Y esto es así porque esta ley que modifica la ley 24.937 no es una creación para mejorarla sino que tiene como finalidad buscar impunidad a partir de la designación de jueces adictos y controlar la destitución de los magistrados como arma de presión para los que no aceptan ser sometidos.
 
Nuestro deber en temas fundamentales es no sancionar leyes de vida efímera sino normas jurídicas sólidas, esas que se afirman en la realidad social, estructuran relaciones y alcanzan su asentimiento casi inadvertidamente. La ley que basa toda su eficiencia en el poder de la sanción está perdida porque el objeto perseguido no es castigar su violación sino provocar su cumplimiento.
 
El conjunto de leyes que estamos considerando son conceptualmente antidemocráticas, simplemente porque desconocen a las minorías. Sólo el autoritarismo desconoce la opinión de las minorías.
 
Es inaceptable que una presunta reforma para los próximos cien años, como lo describió el Secretario de  Justicia, se despache en 15 días.
 
Tal procedimiento irregular es una práctica oficialista, inspirada en los dichos de la actual Presidenta que considera al Congreso como un órgano deliberativo del poder ejecutivo.
 
(...) Justicia lenta, presos que entran por una puerta y salen por la otra, impunidad de los funcionarios públicos.
 
(...) La denominada Democratización de la Justicia nos hace recordar la democratización de los medios a partir de cual se edificó un extendido y costoso aparato de propaganda; la soberanía energética, que nos condena e importar cada vez más combustibles; la soberanía monetaria, que nos hace perder reservas mientras se fogonea la inflación con una desbordada emisión.
 
Ahora estaríamos asistiendo a la implementación del anunciado mejoramiento de la calidad institucional, bajo el concepto de que los tres poderes deben estar en manos de la mayoría.
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Por ello se estructuran estos proyectos que atacan a la República, demoliendo la división de poderes, donde la Justicia cumple la función contra mayoritaria para preservar a las minorías y garantizar derechos de los más débiles.
 
Me cabe impugnar la llave maestra de esta embestida contra el Poder Judicial. 
 
El proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura colisiona absolutamente con el artículo 114 de la Constitución. 
 
Implica colocan las cosas al momento anterior a la Reforma de la Constitución de 1994, cuando se formalizó este organismo extrapoder, con prevalencia de criterios técnicos para evaluar la ideoneidad y conducta de los jueces, preservándolos de los avatares de la política partidista. 
 
Se cambia el paradigma del mérito por su capacidad, al mérito por su adscripción política mayoritaria. 
 
Fui entonces Convencional Constituyente y soy desde 2007 miembro de ese Consejo, tengo muy claro de que hablo y mucho podríamos hacer para optimizar su funcionamiento. 
 
En cambio se resuelve romper el equilibrio entre estamentos, politizarlo en desmedro de los profesionales del derecho, caracterizando de corporativo a los jueces, como si no fuesen un poder independiente del Estado.
 
En el Consejo de la Magistratura propuesto
 
1. Se cambia la composición de 13 a 25 y se desequilibra (viola el artículo 114 de la Constitución Nacional).
 
2. Se elige por el voto popular (viola el artículo 114 de la Constitución Nacional).
 
3. Se cambia la mayoría.
 
Existen acordadas de la Corte Suprema, la ley de partidos políticos y las PASO que veda semejante involucramiento partidario a quienes luego deben impartir justicia y aplicar a ley, con toda la dependencia y desconfianza que se imprime por esa pertenencia. 
 
Casi que les aniquila su certeza de imparcialidad con la sola sospecha que surge del hecho, que por ser contemporáneo con la elección Presidencial, no sólo agrava ese compromiso sino que acompañará los resultados que obtenga el poder político. 
 
El control deje de ser judicial y pasa a ser político que controlará sus propios actos, en el Poder Ejecutivo y el Legislativo, con cuyos diputados y senadores también compartirán tramos de la misma boleta.
 
Entonces se estableció mayorías agravadas para acusar y destituir jueces.
 
No estamos ante el riesgo de jueces que gobiernen con sus sentencias sino ante el abismo de una sociedad sin jueces imparciales, ni periodistas independientes, sin tolerancia para dirimir diferencias ni espacio para expresar disidencias.
 
(...) No me extraña que no se tenga conciencia de impacto que estas iniciativas tienen en la vida socioeconómica del país. Aquí se ha aplaudido la concepción del Vice Ministro kicilof para quien la seguridad jurídica es “horrible”.
 
 Si la seguridad jurídica es horrible la Justicia también debe ser horrible.
 
La demolición de la seguridad jurídica, la permanente alteración de las reglas del juego, la falta de un programa consistente hacen caer todos los años la inversión doméstica y extranjera afectando seriamente la creación de empleos con salarios en blanco. Sus consecuencias son elocuentes:
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1) 11 millones de desocupados-
2)12 millones de pobres.
3)40% en negro.
4)800 mil jóvenes que no estudian ni trabajan.
 
Para sobrevivir cuando se agotan las cajas, el populismo debe apelar a silenciar la crítica, asfixiar con más impuestos, desfinanciar a las provincias, exprimir los fondos previsionales, confiscar activos y captura el Estado para los partidarios. Al desmantelamiento de los organismos de control le sucede la corrupción y la impunidad. (según Savater, el Populismo es el gobierno de los ignorantes).
 
El populismo siempre sojuzga las instituciones y termina destruyéndolas por imperio de sus necesidades, cada vez más ampliadas porque el relato no alcanza a suturar las evidencias que cristalizan desigualdades y atizan la violencia. 
 
El populismo en la escasez, cuando se agotan las exculpaciones procura dividir creando bandos irreconciliables para cohesionar a los propios en una cruzada imaginaria que avente la llegada de los que le vienen a arrebatar lo conquistado. 
 
El populismo es una renuncia a transformar las estructuras productivas, para emerger del subdesarrollo y una costosa hipoteca que recae sobre los que menos tienen.
 
Sr Presidente: 
 
Vivimos un tiempo de infortunio político donde la construcción electoral se hace a costa del capital social. En estos años el país dilapido su stock y el populismo gobernante dejo a millones de compatriotas  anclados en las capas más bajas de la sociedad, aumentando las desigualdades. Estos son los resultados sociales más gravosos del modelo Kichnerista, consecuencia de sus equivocadas políticas. 
 
Sr. Presidente: 
 
Alguien tiene que tomar la decisión de parar este atropello, si no lo hacen UDS sepan que la gente lo hará  en las urnas  y en las calles porque cada vez son más los millones que reclaman el cambio que todos anhelamos. Sabrán que nada es imposible y que se puede derrotar a esta perversidad de tomar al ciudadano como cliente o la inmoralidad de anclar a la gente más humilde en la pobreza.  Será el tiempo en que el pueblo les dirá: Hasta acá llegamos.
 
Sr Presidente: 
 
Lo digo con dolor estamos al final de un gran tiempo perdido, sabiendo que nuestro tiempo es limitado. Por eso les digo en nombre de quienes me colocaron en esta banca que no tienen derecho de apropiarse inútilmente del tiempo que nos ha sido concedido para vivir en este mundo."

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