EL CEO MÁS INFLUYENTE DE ESE PAÍS

¿Quien será el rival de Maduro en las Presidenciales de Venezuela?

Las elecciones presidenciales en Venezuela ya tienen fecha, y es que el Consejo Nacional Electoral de ese país (CNE) anunció la fecha para la contienda: será el 22/04. El Partido chavista-madurista PSUV, ratificó a Nicolás Maduro como el candidato del oficialismo, mientras que los líderes políticos de la oposición que podrían darle la "batalla" al actual Presidente se encuentran inhabilitados por el régimen venezolano. Sin embargo, el empresario más influyente de Venezuela parece ser el personaje más querido por la población para ser el próximo Presidente. Todo lo opuesto al modelo socialista que gobierna ahora en el país caribeño.

Para una gran mayoría y debido a la situación que atraviesa Venezuela, las elecciones presidenciales que se disputarán el próximo 22 de abril no cuenta con las garantías suficientes para que sea una contienda libre y democrática. Incluso, presidentes de varios países del mundo, incluyendo Mauricio Macri, denunciaron que no reconocerán los resultados de la disputa anunciada por el Consejo Nacional Electoral. 
 
Como era de esperarse, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), ratificó al Presidente Nicolás Maduro como el canditado para las presidenciales del 22/04. "Aprobado por aclamación y por unanimidad, compañero presidente. Es usted oficialmente el candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV)", ha declarado el número dos del gabinete presidencial, Diosdado Cabello, tras una reunión política con Maduro. 
 
En un país normal, (y no en donde los poderes, incluyendo el electoral, esté manejado por el Gobierno), el actual mandatario de Venezuela posiblemente perdería las venideras elecciones. Según el Insistuto Delphos, el porcentaje de insatisfechos en el país se ha elevado al 70%, ante las críticas por la hiperinflación y la escasez de alimentos y medicamentos en Venezuela. 
 
Por su parte, la oposición ha perdido credibilidad y los líderes opositores que tienen mayor aceptación por la sociedad se encuentran inhabilitados: Leopoldo López, Henrique Capriles, Antonio Ledezma y Freddy Guevara, son algunas de las figuras de más peso que están impedidas de presentarse en las presidenciales de este año.
 
Sin embargo, hay un nombre que suena como un candidato que le daría la batalla al sucesor de Hugo Chávez. Se trata del CEO más influyente del país caribeño, que es visto para los venezolanos como "un gerente exitoso". Mucha gente considera que, Lorenzo Mendoza, puede convertir a Venezuela en una gran empresa productiva como Polar (de la que es CEO) y que puede elevar la producción de petróleo como lo hace con su harina y su cerveza (productos más populares y de mayor consumo de la firma Polar). 
 
¿Pero, por qué Lorenzo Mendoza?
 
Lorenzo Mendoza. El CEO de una de las corporaciones familiares más influyentes de Venezuela, Mendoza, es visto por encima de la refriega de la política de la oposición. El líder empresarial ha dicho que no está interesado en correr, pero podría ser un adversario formidable para Maduro si finalmente tiene un cambio de opinión.
 
Entonces, ¿Mendoza es un candidato viable para competir contra Maduro? Y si lo hace, ¿qué significaría para él, y para el país? Aquí hay un vistazo de por qué los venezolanos están pidiendo una candidatura de Mendoza, y cómo podría suceder:
 
Empresas Polar es una institución en Venezuela. Durante más de 70 años, la compañía de alimentos y bebidas ha estado ligada al tejido social del país, tanto como empresa como a través de su organización filantrópica relacionada. Como presidente de la compañía desde 1992 (y nieto del fundador de Polar), el carismático Mendoza ha sido visto durante mucho tiempo como una fuerza positiva en la vida venezolana.
 
Dada la importancia de la compañía en la provisión de alimentos para la economía venezolana, Polar ha sido frecuentemente blanco de ataques políticos, primero por el fallecido Hugo Chávez y más tarde por Maduro. Pero ninguno de los dos se atrevió a tomar medidas radicales, como la expropiación, contra la compañía. Estos ataques -y la resistencia de Polar- han puesto sistemáticamente el nombre de Mendoza en las portadas de Venezuela y han dado a la gente la percepción de que ha tenido éxito en enfrentar al gobierno sin ceder.
 
Después de un año de comportamiento errático, el liderazgo de la oposición ha perdido credibilidad a los ojos de muchos venezolanos que están ansiosos por el cambio. Esto ha dejado un vacío en las expectativas del electorado, y muchos ahora están buscando respuestas fuera del ámbito de la política tradicional. Teniendo esto en cuenta, la reputación de Mendoza con respecto a la inteligencia empresarial y el carisma juvenil que exhibe en público, y es fácil ver por qué su nombre aparece con tanta frecuencia en la búsqueda de un líder que pueda sacar al país de su pantano.
 
¿Qué piensa Mendoza de todo esto?
 
La idea de Mendoza como candidato es generalizada en los círculos económicos y políticos. Él tiene a su disposición una red de partidarios que rápidamente tomarían el trabajo de tratar de entregarlo a la presidencia. Es casi seguro que Mendoza haya tenido la posibilidad de correr.
 
Aún así, Mendoza ha sido consecuente al decir que no tiene intención de ingresar a la arena electoral, empleando frases como “si sabes contar, no cuentes conmigo”. Esto sugiere que existe la posibilidad de competir por una nominación contra los políticos de la oposición. , ya sea en debates o a través de elecciones primarias, es poco probable. Su candidatura debería ser percibida como un acto de deber público, más que de ambición personal. Como resultado, la única forma realista en que acabaría enfrentando a Maduro es si había un consenso generalizado entre los oponentes del régimen de que él es la única persona para el trabajo.
 
¿Es posible tal consenso?
 
Una candidatura de Mendoza sería bien recibida por una gran parte de los votantes de la oposición. Varias organizaciones no gubernamentales también mirarían favorablemente al empresario como candidato, y probablemente prestarían sus recursos a la causa.
 
Pero hay política a considerar.
 
El comportamiento discordante y contradictorio de las figuras políticas de la oposición en los últimos meses hace improbable que una mayoría esté dispuesta a dejar de lado sus metas personales y apoyar a Mendoza. Aunque algunos grupos de oposición están de acuerdo con la idea, para otros no es un principiante.
 
Tampoco el tiempo está del lado de Mendoza. El corto tiempo hasta las elecciones deja poco espacio para llegar a un acuerdo, independientemente de quién corra. Maduro, por supuesto, lo sabe, es una de las razones por las que trabajó para cambiar la fecha de las elecciones, que originalmente se planearon para más adelante en el año.
 
¿Qué significaría la candidatura de Mendoza?
 
Otro punto a considerar es qué significaría la candidatura para el propio Mendoza. Tomar esta posición lo pondría más allá de un punto sin retorno. Imagínese si fue elegido como un candidato de consenso, y los resultados de la elección fueron cuestionados o fraudulentos (no es un escenario poco probable). Luego, Mendoza enfrentaría presiones para asumir una posición de liderazgo fuera del contexto de la elección en sí. Tomar un asiento trasero en un momento tan crítico después de haber liderado la carga electoral dañaría su reputación y el trabajo de una empresa familiar icónica. Pero ese rol significaría riesgos adicionales para él y su familia, un factor que sería difícil para él ignorar.
 
Para tener éxito en tal escenario, Mendoza debería apuntalar su posición en muchos frentes, con el respaldo garantizado de actores internacionales como el Departamento de Estado, el Grupo Lima, la OEA y la Unión Europea. También necesitaría un apoyo incondicional de la oposición y un plan de acción claro sobre qué hacer el día después de las elecciones, independientemente de cómo se desarrolle.
 
Nadie puede pensar por Lorenzo Mendoza. Cualquiera que sea su siguiente movimiento, se aclarará más después de que se realice una convocatoria formal para las elecciones. Desde mi punto de vista, la probabilidad de una candidatura de Mendoza en las elecciones anticipadas que se esperan para esta primavera es mínima. Pero si huyera, la decisión afectaría a todas las variables en el cálculo político actual de Venezuela.
 

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