El hecho se produjo tras una gran explosión en la atmósfera solar, lo que provocó que las partículas cargadas se dirigieran a la Tierra.
La aparición de la tormenta coincide con la formación de las así llamadas “grietas de equinoccio”, que suelen surgir alrededor de los equinoccios el 20/03 y el 23/09.
Dichas grietas debilitan la protección natural del planeta contra partículas cargadas y además representan peligro para los vuelos comerciales y los sistemas de navegación.
El fenómeno podrá afectar a algunos territorios de Escocia, el norte de Inglaterra y algunas zonas de la parte septentrional de USA.
“Las tormentas magnéticas no son lo mismo que las tormentas o explosiones solares que, como los sismos, no se pueden predecir, pero ocurren cuando hay regiones activas en la superficie del Sol”,
Hugo Delgado, director del Instituto de Geofísica (IGF), y Esteban Hernández, jefe del servicio magnético.
Los científicos suelen monitorizar los fenómenos geomagnéticos semejantes y valorar la amenaza que representan. No obstante, los expertos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica califican el próximo acontecimiento como una leve tormenta.
Por su parte, el responsable técnico del Laboratorio Nacional de Clima Espacial (Lance), Américo González Esparza explicó que aunque se la llama Tormenta Magnética, su nombre correcto es Tormenta Geomagnética, y se producirán eventos menores y cotidianos, “de los cuales no debemos preocuparnos”, recalcó.
“Nos van a llegar partículas que van a interaccionar con el campo magnético y que posiblemente le produzcan una variación ocasionando una tormenta geomagnética, pero en la región de México va a pasar prácticamente desapercibido o simplemente se logren producir auroras boreales y algunos efectos menores en sistemas tecnológicos ”, agregó.
González Esparza expuso que el Sol tarda 27 días en girar alrededor de su eje, y que es en este movimiento cuando arroja las partículas en dirección a la Tierra.
“Estas tormentas geomagnéticas son eventos comunes, cotidianos en esta parte del ciclo, incluso este fenómeno se ha registrado cada 27 días en los últimos dos meses anteriores, y es por esto que puede predecirse y puede anunciarse con tanta antelación que va a ocurrir un fenómeno o una tormenta magnética”.
Por el momento no se han registrado ningún caos socio-económico-político
Por ejemplo, los eventos del 2/09/1859, cuando los telégrafos quedaron inutilizados debidos a una gran tormenta solar conocida como el evento Carrington (cuya historia os explicábamos en el artículo que enlazábamos antes). También está lo ocurrido en 1967, ya en un momento mucho más avanzado de la tecnificación del mundo, pero siendo una tormenta más leve y que ya tuvo sus consecuencias globales. Sin olvidar lo sucedido el 13/03/1989 que recordaba la NASA también: el apagón durante 9 horas que afectó a 6 millones de personas al colapsarse la estación hidroléctrica de Québec.