Cambia la inyección letal por el pelotón de fusilamiento

El homicida estadounidense Ronnie Lee Gardner decidió de qué manera será ejecutado en las próximas horas en Utah. En ese Estado el fusilamiento fue derogado en 2004, pero en este caso se aplicará con retroactividad.

En un país con más de 3.200 personas en el corredor de la muerte, la ejecución inminente de Ronnie Lee Gardner en la estounidense Utah es noticia por el método que el propio condenado ha elegido para morir. Gardner será fusilado durente los 1ros minutos del viernes (18/6). Es la primera ejecución de este tipo en USA en 14 años.
El preso fue condenado por un asesinato que cometió en 1985 y lo más probable es que se convierta en la tercera persona en morir tiroteada -todas en Utah- desde que el Tribunal Supremo reinstauró la máxima pena en 1976.
En estos momentos, su apelación para suspender la condena está en la máxima corte y es la última oportunidad para que el reo salve la vida.
Utah es el único de los 35 estados donde se aplica la pena de muerte (de los 50 de la Unión) que tiene al pelotón de fusilamiento entre los métodos para la ejecución de la condena. Oklahoma también lo permite pero si, y solo si, la inyección letal o la electrocución son declarados inconstitucionales. 40 de las 49 ejecuciones que ha llevado a cabo Utah en los últimos 160 años han sido de esta manera, según el centro de Información para la pena de Muerte (DPIC, en sus siglas en inglés).
Gardner estuvo semanas decidiendo cómo quería morir. Utah desterró el fusilamiento en 2004, pero de forma retroactiva, por lo que los presos condenados antes de esa fecha y que deseen ser tiroteados, pueden hacerlo.
Durante el periodo en que el reo dudó entre el fusilamiento y la inyección letal, Gardner consideró cómo sería una muerte atado a una silla, con una capucha en la cabeza y una diana colgada en su pecho. Cinco tiradores -los verdugos deben tener el visto bueno del Departamento de Prisiones y ser agentes del orden-, armados con rifles del calibre 30 y sólo cuatro de ellos cargados con balas de verdad -el quinto las tiene de fogueo- apuntarán al corazón de Gardner y dispararán en cuanto él acabe de decir sus últimas palabras. Un médico estará en la sala contigua para certificar su muerte.

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