Aníbal, contra el mundo

Tuvo un día de furia el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Tras responderle esta mañana duro a al presidente de Fiat Argentina, Cristiano Rattazzi, por la seguridad jurídica, luego le pegó a su antecesor en el cargo, Alberto Fernández, a Isidro Graiver y a Magnetto.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Es un día de furia para el jefe de gabinete hoy (27/08). Tras responderle esta mañana duro a al presidente de Fiat Argentina, Cristiano Rattazzi, por la seguridad jurídica, más tarde 'atendió' a su antecesor en el cargo, Alberto Fernández, al afirmar que el ex funcionario, "que ahora defiende a Clarín", no se "sentaba" a dialogar con los responsables de los medios, al tiempo que aseguró que él "sí" lo hace, en un gesto de apertura en la política comunicacional del Gobierno.
El jefe de ministros insistió, además, en desacreditar a Isidoro Graiver, quien ratificó ante la Justicia que Papel Prensa no fue vendida bajo "presión ni extorsión, y renovó su embestida contra el CEO del grupo Clarín, Héctor Magnetto. Luego, defendió el programa oficialista "6,7,8", que diariamente difunde la televisión pública con  fuertes cuestionamientos a la oposición y a periodistas críticos del Gobierno, y  afirmó sobre el envío: "lo veo todos los días, está en un canal que finalmente dirijo  yo, ya que funciona bajo la órbita de la Jefatura de Gabinete".
"Cuando un programa es un buen producto, que tiene casi 10 puntos de rating (sic),  cómo no voy a reconocerlo" resaltó en declaraciones a radio Mitre y señaló: "Yo voy  con gusto a ese programa". Al reivindicar la política del Gobierno en materia de  medios y la relación que la Casa Rosada mantiene con todos, aún con los más críticos,  Fernández embistió contra uno de sus predecesores en el cargo, Alberto Fernández en  relación al "acoso de los Kirchner a Perfil", cuando este medio era "el enemigo a  combatir" por el oficialismo.
Entonces, Fernández reaccionó: "No es verdad, yo me senté a hablar con (Jorge)  Fontevecchia para hacer una cosa distinta que lo que no podía haber funcionado antes".

"En aquel momento el jefe de Gabinete, que ahora defiende a Clarín, no se sentaba con  Fontevecchia y yo me senté con Fontevecchia a ver cómo se podía hacer para trabajar  una cosa de una manera distinta. He dado notas a Perfil", resaltó, en un abierto  reproche a su antecesor.
Añadió que él ha "intentado por todos los medios que no haya nadie que no tenga  posibilidad de tener contacto con el Estado y trabajos en conjunto". Esta semana,  luego del informe dado a conocer por la presidenta Cristina de Kirchner sobre Papel  Prensa, Alberto Fernández, director por el Estado de esa compañía durante años, tomó  distancia de la versión oficial al afirmar que nunca tuvo conocimiento de supuestas  irregularidades en la venta de esa empresa.
Por otra parte, el jefe de ministros dijo no "creer" en la solicitada en la que  Isidoro Graiver, hermano del fallecido dueño de Papel Prensa, negó que esa compañía  haya sido vendida a los diarios Clarín, La Nación y La Razón, en 1976, bajo presión de  la dictadura, lo que luego reiteró en sede judicial. "Lo que aparece en la solicitada,  en la que no creo, porque de Magnetto para abajo no creo en nada de eso, no tiene  dónde sostenerse", disparó Fernández.
Luego de tender un manto de sospecha sobre esa publicación, al resaltar que "sabe Dios  quién pagó en Clarín", Fernández atacó una vez más a Magnetto, de quién dijo tener "el  peor de los conceptos".
"Lo considero un impresentable, un señor de baja estofa que ha hecho cualquier cosa  por condicionar a los gobiernos, la actividad económica del país, presionando todo lo  que ha podido", lanzó.

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